La importancia de una oficina limpia
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Está comprobado, un lugar de trabajo limpio y ordenado se traduce directamente en una mayor productividad por parte de los empleados.
Mantener estos espacios limpios y con un olor adecuado, resulta también imprescindible a la hora de dar una buena imagen a clientes, proveedores, y demás visitas, además del punto importante a tener en cuenta que ejerce la limpieza sobre la salud de las personas.
Los españoles pasan la mayor parte de sus horas de vigilia en el trabajo. Según varias investigaciones, nuestros puestos de trabajo son superficies propensas a gérmenes y bacterias con las que entramos en contacto diariamente. Cada vez es más importante mantener la limpieza de oficinas limpia y ordenada, para ello es necesario adoptar una serie de medidas de higiene para evitar cualquier propagación de cualquier virus o bacteria en el lugar de trabajo. A continuación, empresas de limpiezas te aporta varios consejos a tener en cuenta cuando se limpia tu espacio de trabajo.
La limpieza del mobiliario de oficina
La piel natural o sintética con la que está forrado el mobiliario sintético suele adsorber la suciedad, lo que complica su limpieza y en ocasiones imposibilita obtener un buen resultado.
Por ello, estos muebles se deben limpiar con cierta regularidad con productor especiales para textiles sin mojarlos demasiado, ya que si se hace, se podría ensuciar la tapicería exterior del mueble. En el caso de pieles naturales, es necesario hidratarlas frecuentemente, utilizando productos específicos que cuidan y alargan la vida del mueble.
También resulta imprescindible realizar otro tipo de limpieza periódica mecanizada, con unas máquinas especiales que utilizan espuma seca, o un sistema de inyección-extracción.
Limpieza de los equipos informáticos
Con la superficie de tu escritorio bien limpia y desinfectada, es hora de pasar a la limpieza de tus dispositivos, periféricos informáticos y accesorios de escritorio. Antes de proceder, asegúrate de que todo está completamente desenchufado de las tomas de corriente.
Los ordenadores, las fotocopiadoras, impresoras, fax y elementos de este tipo, se deben limpiar utilizando una bayeta de microfibra que contenga un poco de agua y solución desinfectante neutro que no estropee ni dañe los equipos.
Las pantallas de cristal líquido, monitores de LCD, son delicados a la hora de ser limpiados, ya que si hay algo de polvo en la pantalla, cuando se pasa la bayeta seca se pueden arañar.
Antes de comenzar la limpieza es importante apagar el monitor y a ser posible desconectarlo como se ha mencionado anteriormente, pasar un paño húmedo con algún producto anti-estático y acto seguido proceder a secarlo. A continuación es importante limpiar los cables del monitor antes de volver a conectarlo.
Cómo limpiar la pantalla del ordenador
Con el tiempo, el polvo, la suciedad y las manchas pueden acumularse en el monitor, especialmente si tienes la costumbre de tocar la pantalla cuando apuntas a algo. La limpieza de una pantalla de ordenador requiere un poco más de cuidado y atención que otros elementos de tu puesto de trabajo, por lo que aquí tienes algunos consejos para limpiar tu monitor y evitar que se dañen los componentes delicados.
Como regla general, no apliques productos de limpieza directamente sobre la pantalla, ya que éste podría introducirse en sus botones, con las nefastas consecuencias que esto podría suponer. Los líquidos pueden penetrar en la fina capa exterior de la pantalla, filtrarse en el monitor y causar daños, enturbiamiento y decoloración. En su lugar, humedece un paño de microfibra limpio con agua fría y escúrrelo bien antes de limpiar la pantalla con movimientos largos de lado a lado. Evita utilizar toallas de papel o paños de limpieza ásperos, ya que pueden rayar la pantalla.
Para evitar posibles daños en el equipo, éste se debe limpiar cuando se encuentre apagado y siempre de manera adecuada, por lo que se recomienda no aplicar productos agresivos de limpieza, cuyos productos químicos podrían llegar a estropear la pantalla. Tampoco hay que usar productos con alcohol etílico, amoniaco o acetona.
La limpieza del teclado y del ratón
El teclado también hay que desconectarlo del ordenador antes de limpiarlo y darle la vuelta propiciándole algún suave golpe por si en él se hubiera introducido alguna partícula extraña, ya que de este modo saldría y se caería. Las teclas y el resto de la superficie del teclado en sí se pueden limpiar con un paño de microfibra.
Aunque los ratones ópticos son menos propensos a acumular suciedad que los antiguos ratones mecánicos, siguen acumulando suciedad y bacterias en la parte inferior del ratón y en las zonas que entran en contacto con las manos y los dedos.
Es recomendable al igual que el teclado desconectar el ratón antes de limpiarlo, es necesario utilizar un paño y un producto específico, quitar el disco circular de la bola de tracción y limpiarlo prestando atención a que el paño no esté muy húmedo. En el interior de esa bola de tracción se encuentran unos rodillos, que también suelen contener suciedad, los cuales se pueden quitar con la ayuda de unas pinzas para una mayor limpieza.
¿Con qué frecuencia se debe limpiar el puesto de trabajo?
Se debe intentar limpiarlo y desinfectarlo a fondo cada semana. Entre estas limpiezas profundas, intenta desinfectar una vez al día los puntos de mayor contacto, como los teléfonos, teclados y ratones.
Incorpora a tu horario, la limpieza regular de tu puesto de trabajo estableciendo un recordatorio para dedicar unos minutos a la limpieza y el reajuste de tu puesto de trabajo en un día de la semana. Por ejemplo, los lunes por la mañana son los que mejor funcionan para la mayoría de las personas, ya que te dejas el escritorio limpio para el resto de la semana.
